MARCHE

Marché al día siguiente 
de tomar la decisión, la tuya.

Marché al tú pedir tiempo,
parar,
detenernos,
aparcar algo único e irrepetible.
Lo hice, marché.

Pero marché emborrachándome,
como los borrachos lo hacen a diario.
Pensé olvidarte de esa forma,
el resultado fue dolor de cabeza
a la mañana siguiente, aún te pienso.

Marché por el mismo camino cual
llegue a ti, sin avisar, en silencio,
así lo quieres tú.
Marché con la ilusión de recordarte
feliz, sonriente y libre.
De momento consigo verte así.

Marché sintiendo esa última tarde,
esa íntima vez, sintiendo mis tripas
doloridas, el desgarro de mi pecho
abierto en canal.
Marché sin mirar atrás, no te quise 
ver, no pude, la tentación de
agobiar tu decisión me empuja
a caminar en dirección contraria 
a la tuya, a tu florida espalda, la
misma que cobija tu valentía, el
dorso de tu dura alma, la de la
guerrera que eres.

Yo marché con la mochila repleta
de amor, de ti, de momentos, vivencias
compartidas y disfrutadas.
Marché con la ilusión de volvernos
a encontrar, o no, pero yo ya marché.

Gracias y hasta pronto.

                                    Jerofer. 26/4/21
                                     Huetor-Tajar 

Comentarios

Entradas populares de este blog

LIBRES

Me MUERO

COMENZAR