JEROFER CONDUCE

 En su joven vida tan sufrida se convirtió en hombre maduro antes de su tiempo natural. Los baches y hoyos del camino le hicieron ser una bella persona, responsable de sus actos. Dé gusano paso a mariposa  sin darse cuenta de sus alas, era tan bello que volaba libre. No tenía consciencia de su ser  puesto que se centraba en los demás  sin observar su vuelo raso, libre. Sus colores aleteaban al viento llegando a rincones inimaginables, sacudiendo el polvo de mi vejez. Admiración siento por él  a cada segundo compartido de esta misera existencia. Fuerza,            empuje,                        comprensión, de alguien que no se dedica a ser el último de la fila. Remando una barca cargada de personas que le pesan en la espalda. Deseo que consigas tus metas.                              Campo de Criptana                                       27/9/2020                                         Jerofer.

 Tenía un café tan largo que había que calentarlo varias veces, siempre. Sus palabras, sabias por lo vivido antańo, distinto tiempo, difíciles. Sabias por ser él sabio. Hacía que el café  se enfriará a cada segundo, paralizaba el reloj, congelaba. Tenía un café tan largo que no tenía prisa por acabar, hablaba pausado, respirando cada pensamiento antes de  exponerlo, de expulsarlo. Las ondas de sus sentimientos  volaban al aire de la habitación  como burbujas de un pompero. Flotaban lentas, ascendían, explotaban  instantáneas mientras otras nacían, superpuestas, entrelazadas. Soplaba suavemente sus recuerdos, acariciaba su interior más profundo, buscando cada rincón ya empolvado  de su vieja memoria. Limpiaba el polvo despacio, luego fluía sin pausa, lúcido, sin prisa. Tenía un café tan largo. Hablábamos en tertulias de tarde, en mesa camilla y en enaguillas, cuando la lluvia con viento hacia que se fuese la electricidad, renaciendo así la luz de la vela en palmatorias de cerámica. Mi a

 Noches de asedio  a mi cabeza, donde confunde el sentimiento  por alcohol ingerido en dosis de barra. Entonces se derrumba el empoderamiento de mi persona, y comienzo a sentir, buscar la forma de recuperarte. Sangro conforme  por un recuerdo pasado, casi enterrado por  la pesada losa del tiempo, donde no atisbo a ver. Aún así, en el asedio quiero llamarte, escribirte, pero tú marchaste lejos. No sirve buscar a quien abandonó tu ilusión. Pero en noches de asedio mezcladas con debilidad, quiero, deseo encontrarte al otro lado de la ventana, donde tu alma se esconde.                              REUS                           17/9/2020                              Jerofer

En la cueva, fuego,  salir,        escapar,                    vivir!!!. Correr las calles por aceras transitadas por perfumes ajenos, rostros descononocidos. De la cueva a Granada, sentir,          reír,                ilusionarse. Sentarse en la puerta de cualquier taberna con vino en copa y tapa a degustar. Queso,            uvas,                    higos. La sencillez del  momento da la  verdadera felicidad, brindando por ello. Cueva en Granada feliz.                          Vilanova i Geltrú.                                 15/9/2020                                   Jerofer

 Pudimos haber sido mucho,  pudimos conquistar un todo,  pero al perdernos en el laberinto   de la incomprensión,  caímos por un acantilado   precipitándonos a un vacío,  a un silencio,                       a solo un recuerdo.  Pudimos ser aún más que felices,  pudimos compartir pequeńos instantes,  momentos infinitos de felicidad   bańados  por un amor,                                         amistad,                                   por decisión. Siendo un diamante en bruto abandonamos antes de pulirlo. Pudimos crear una gran historia, pudimos ser ejemplo de una verdad, de un amor real sin complejos  que ofreciera luz a ciegos y críticos de lo que desconocen. Pero solo nos quedamos en fracaso de lo que pudimos llegar a vivir. Pudimos!!!!                                   RIDDERKERK. NL                                          30/8/2020                                            Jerofer.

 Cuando ruedo mi camión  desde Suiza  a Italia, te pienso. Te recuerdo, siempre lo mismo, paso de San Gotardo, sonrió. Entonces me vienen imagines cuando a las Tres de la madrugada comíamos pizza en La Gotardo, -pizzería de Getafe, MÍTICA.- Me acuerdo de los fríos inviernos  con tu nariz roja y tus frías manos, pero antes guapa que sencilla, bella, siempre brillando con luz. Recuerdo los cálidos veranos, donde entrar dentro era infierno, por el calor acumulado del horno. Pedíamos por la pequeńa ventana.       Cuando ruedo el paso de San Gotardo, soy feliz pensándote, sonrío............                                           23/8/2020                                               TAVEL F                                              Jerofer.

 Ahora,            entrado ya en edad avanzada, sé que te amo como el primer día; beso. Aquel día que me llevaste de la mano a la esquina tenue, para con fuerza apretarme contra  la pared, para besarme delicado la boca. Entonces las mariposas del estómago  desconocidas para mi hasta ese instante, erizaron mi piel, haciendo sentirte en lo más profundo de mi ser. Mientras,                mi mente se preocupaba de que nadie del pueblo nos pudiera ver. Ahora,           no recuerdo las mariposas  cuando me besas, pero te amo, lo sé!!!. Pues cuando tardas en hacerlo, sufro. Ahora,            no me preocupa la gente pero cuando no me besas sufro. Ahora,           ya maduros se que el universo  nos unió para observarnos dentro, por siempre, reconocernos sin prejuicios. Ahora, por todo ello, más que nunca quiero que me beses en la tenue esquina. Ahora se que siempre fuiste tú.                                                TAVEL. F                                                  23/8/2020