SUEŃOS
Sueńos perdidos o abandonados se amontonan guardados dentro de maletas de distintas formas, tamaños y colores. Sueńos que un día fueron ilusión y deseo, se perdieron por impaciencia, por la prisa de individuos que al tardar los obviaron. Sueńos de personas únicas, con metas propias que se despistan por encrucijadas sendas distrayéndose del objetivo y así se olvidan de ellos. Sueńos que llegan tarde, sueńos que no se cumplen a tiempo. O simplemente ya no interesan. Pero los sueños siempre se dan, aún para no ser disfrutados ya por nadie. Entonces se guardan en maletas que cada cual amontona en su alma, escondiéndolos así de miradas indiscretas y pasando a ser secretos, íntimos e inconfesables. Pero los sueños siempre se dan. Jerofer. 20/4/21 Villanueva del Rosario.